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ToggleCuando se utiliza una impresora, ya sea en el hogar o en una empresa, una vez que se ha conectado y ha sido detectada por el ordenador a la que está vinculada o por las de la red a las que brinda servicio, está lista para imprimir.
Por defecto, la impresora viene con una configuración predeterminada que garantiza un rendimiento adecuado en la mayoría de los casos. Sin embargo, puede haber situaciones en las que se desee modificar ciertas funciones, como aumentar la velocidad de impresión.
Para lograrlo, en primer lugar, es necesario realizar un mantenimiento adecuado de la impresora. Además, se deben ajustar los parámetros de configuración tanto en el ordenador desde el cual se enviará la impresión, como en la propia impresora. Sin embargo, es importante tener en cuenta que las opciones de impresión disponibles pueden variar según el modelo de impresora.
Por lo tanto, siempre es recomendable consultar el manual de la impresora y las opciones disponibles para poder aumentar la velocidad de impresión. Asimismo, es posible que una impresión lenta se deba a otros aspectos que requieran corrección, como se explicará a continuación.
Aumentar la velocidad tras un cambio
En ocasiones, después de realizar un cambio, la velocidad de impresión de una impresora puede disminuir sin una causa aparente. Aunque no se haya realizado ninguna modificación en su configuración, se percibe que funciona más lentamente. Un ejemplo común de esto es cuando se actualiza el sistema operativo o se cambia por otro. Después de instalar un nuevo sistema, se observa que la impresora no imprime al ritmo habitual y las páginas se generan más lentamente.
En este caso, lo más probable es que el controlador o driver de la impresora no esté optimizado para la nueva versión del sistema operativo instalado. Esto puede ocurrir, por ejemplo, al actualizar a Windows 10. En tal situación, será necesario actualizar el controlador para que la impresora recupere su velocidad anterior e incluso funcione más rápido.
Sin embargo, es posible que no se tengan los permisos necesarios para realizar esta actualización, especialmente si la impresora está instalada en un entorno empresarial con un departamento de informática o mantenimiento de equipos. En tales circunstancias, será necesario notificar el problema al encargado del mantenimiento del equipo para que ellos se encarguen de resolverlo.
Cambios en la configuración que aceleran
Cuando se adquiere una nueva impresora, es necesario ajustarla a las necesidades de cada usuario, ya que la configuración predeterminada puede no ser suficiente en muchos casos. Para optimizar la velocidad de impresión, existen medidas que se pueden tomar.
Para ello, es necesario acceder a las opciones de configuración de impresión tanto del sistema como de la propia impresora. En Windows, por ejemplo, esto se puede hacer a través del Panel de control, que brinda acceso a diversas opciones de configuración del ordenador y sus periféricos.
Dentro del Panel de control, se debe buscar la opción que permita acceder al hardware del sistema y, dentro de ella, a las impresoras. En este panel, se mostrará el modelo de la impresora a la que se tiene acceso desde el ordenador y se desea aumentar la velocidad de impresión. Es importante revisar las opciones disponibles, aunque aquellas relacionadas con la calidad son las más relevantes para incrementar la velocidad.
Hay que tener en cuenta que cuanto mayor sea la calidad de impresión, menor será la velocidad. Por defecto, la mayoría de las impresoras suelen estar configuradas en un nivel de calidad «media». Esto significa que aún existe margen de mejora si se requieren impresiones con menor calidad. Por lo general, esta opción se denomina «Borrador» o está etiquetada como una configuración de menor velocidad. Al seleccionarla, las copias se imprimirán con una calidad aceptable para documentos internos y textos de referencia personal, pero lo harán más rápidamente. Si se necesitan impresiones de mayor calidad, con mayor resolución, es importante volver a la configuración del sistema y elegir una calidad más alta.
Estas son solo algunas de las acciones que se pueden llevar a cabo para aumentar la velocidad de impresión. Si tienes más dudas o se deseas conocer más opciones para modificar la velocidad de impresión, se recomienda contactar con el fabricante de la impresora o con la compañía que proporcionó el servicio de renting mensual, ya sea para impresoras en blanco y negro o en color. Seguramente encontrarán opciones adicionales para obtener impresiones en papel de manera más rápida.